La premisa de la guía es simplemente agradar, caer bien o por lo menos no estorbar al hombre. De hecho, todo el recetario tiene esa finalidad: una marido feliz y una esposa abnegada. Paradojicamente, fue una mujer la autora de esta suerte de manual de la perfecta sumisión: Pilar Primo de Rivera, y fue distribuida en España en 1953 durante el gobierno de Franco.
Precisamente la Falange española tenía la idea de relegar a la mujer en un segundo plano de acuerdo a los cánones cristianos y conservadores de la época y característicos de ese tipo de gobierno. La guía fue distribuida en la Sección Femenina del Servicio Social, que precisamente dirigía Primo de Rivera.