El devastador ciclón invernal Elliot ha dejado un rastro de destrucción a lo largo de Estados Unidos y Canadá, con un total de 60 muertes reportadas en ambos países. La tormenta, que ha sido categorizada como una "ciclón bomba" debido a su cambio rápido en la presión atmosférica, ha sido potenciada por el vórtice polar, un fenómeno atmosférico que ha contribuido a la intensidad de la tormenta. Además, la oscilación del Atlántico y la "doble barrera" han impedido que el aire frío escape hacia el norte, lo que ha contribuido a su acumulación en el sur de Estados Unidos y Canadá.
La tormenta ha dejado carreteras intransitables, miles de vuelos cancelados y cortes de electricidad y agua potable en ambos países, especialmente en Ontario y Quebec, en el noreste de Canadá. Los habitantes han sido instruidos a permanecer en sus hogares y seguir las medidas de emergencia para protegerse del frío extremo y las condiciones peligrosas.
Es importante tener en cuenta las medidas de seguridad necesarias durante esta tormenta sin precedentes y protegerse del frío extremo. Abrigarse adecuadamente, cubrirse la cabeza y las extremidades y mantenerse hidratado son algunas de las medidas más importantes. También es esencial tener un kit de emergencia preparado y seguir las instrucciones de las autoridades y los servicios de emergencia.
Es importante tener en cuenta que, aunque la tormenta Elliot ha causado un gran daño, las condiciones climáticas extremas son una realidad en muchas partes del mundo y es importante estar preparados para enfrentarlas. Mantenerse informado sobre el pronóstico del tiempo y seguir las medidas de seguridad adecuadas pueden ayudar a minimizar el impacto de estos fenómenos y proteger a las personas y a las comunidades.
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